viernes, 7 de abril de 2017

¿Tu hombre no se compromete?


Encuentra el origen emocional a la falta de compromiso de tu pareja y descubre cómo conseguir que tu hombre se comprometa.


La falta de compromiso no solamente se refiere a casarse, también, a las actividades propias de un hombre como padre y pareja.

No te voy a mentir, la tarea de conseguir el compromiso de este hombre es bastante difícil. Pero si crees que la relación vale la pena o eres casada y tienen hijos, te invito a seguir leyendo y a apostar por este amor.

Ah, pero antes de proseguir, debes poner en consideración que, puedes estar acelerando una relación que no está al nivel de compromiso que quieres. Es decir,  este amor no es lo suficientemente estable ni las circunstancias todavía están dadas para lo que deseas. Ahora, si ya tienes hijos con este hombre tienes razón en pedir compromiso, sin embargo, lee el artículo de modo receptivo para que chequees si exiges demasiado

Para empezar, vamos a hablar de los principales conflictos emocionales que ocasionan que un hombre tema al compromiso, los cuales están recogidos en dos conductas que son: El Hijo Proveedor y el Síndrome de Peter Pan. 

Ambas conductas se empiezan a establecer en la infancia. De la conducta de Peter Pan hemos hablado en otros escritos, por eso, en este artículo nos centraremos en el Hijo Proveedor. 

Ahora, puedes ver el video para hacerte una idea del tema,



Hijo Proveedor



Al hijo mayor se le atribuyen características afines a su posición, tales como: su capacidad de liderazgo, los afectos paternales, los arraigos a las costumbres familiares y el proteccionismo, este último en especial adjudicado a su papel de cuidador, cuando existen otros hermanos.  En épocas pasadas se deseaba que el mayor naciera hombre para que continuara el linaje, la herencia y tal vez por ego, el padre en especial deseaba ver la proyección suya, representando sus ideales y sueños en la figura de este descendiente.  Sin embargo, el hijo mayor también podría traer frustración cuando su embarazo constituía una indeseada “sorpresa” (hijo no deseado) para los padres y en oportunidades, el motivo de unión forzosa entre ellos. 

Debido a todo esto, el hijo mayor suscita, en el mundo de la pareja, gran cantidad de cambios y según el grado de consciencia de los noveles progenitores, unas secuelas para el primogénito. Dentro de las posibles encontramos algunas de poca trascendencia como, por ejemplo, aquella apreciable en la cabeza plana en la parte posterior de algunas personas, motivo de burla en reuniones familiares, adjudicado a la falta de experiencia de los padres para rotar la cabeza del neonato mientras duerme. No obstante, existen otras secuelas que determinan elcomportamiento emocional y/o psicológico del hijo en la edad adulta y se constituyen en algo más que una impronta en la cabeza.

El hijo mayor puede presentar una gran carga emocional; siendo una de las consecuencias a destacar, la del Hijo Proveedor”. Por consiguiente, trae resultados nocivos a la hora de constituir pareja y familia en la edad adulta, observemos algunas de las actitudes más frecuentes para identificar la presencia de esta conducta:

  • Puede ser el “solterón”, si se casan, lo hacen a edades avanzadas.
  • Es el “novio eterno”, un hombre que es muy buen novio, pero sale despavorido cuando se le habla de matrimonio e hijos. Así que, si pasan los años y este hombre no se dispone a cumplir tus deseos de formalizar más la relación ¡ten cuidado, mujer!
  • Se trata también del “mujeriego” que salta como rana entre un mosaico de femeninas, sin comprometerse con ninguna.
  • Si no tiene hermanos menores, suele ser un buen padre.
  • Por lo general vive con su madre hasta edades avanzadas o vive muy cerca de ella (La edad adecuada para emanciparse es entre los 25-30 años).
  • Sus encuentros con el sexo opuesto están más centrados y enfocados en el contacto sexual, es el típico hombre que seduce y busca sexo con prontitud y aceleración, “un pulpo.”.
  • Cuando se encuentra fuera del radio de distancia de sus padres, llama por teléfono o busca contactar desesperado con ellos.
  • Prioriza las necesidades económicas de su madre a las de su esposa e hijos cuando está casado.
  • Busca, para casarse una mujer que represente a su madre. Es esta la actitud que mayormente determina la ostentación de ser un Hijo Proveedor”. Así que, mujeres, atención, si observas que eres similar a tu suegra.
  • Visita o cumple con frecuencia y puntualidad a sus padres, es el típico hombre que dice: “los miércoles no puedo porque es el día de visitar a mi madre”.
  • Consulta con constancia a su madre para tomar cualquier tipo de decisión, desoyendo a su novia, esposa, hijos o amigos.
  • Si está casado, busca mantener las mismas costumbres o tipo de educación recibida por sus padres, es aquel que dice: “así lo hace mi madre”.

Ahora reparemos en los antecedentes emocionales para que un hijo se convierta en “Proveedor”:


v   Desde niños adquieren compromiso, maduran antes de tiempo y se desenvuelven con adelanto a sus respectivas edades.

v    El perfil emocional de su padre es el de un esposo negligente; se trata de un hombre que se ausenta con frecuencia del seno familiar sea por su trabajo, un vicio, enfermedad, o también, de un sujeto que aún estando en casa se aleja emocionalmente.

v    El perfil de la madre es el de una mujer sobreprotectora, una fémina con grandes vacíos afectivos, ella necesita sentirse protegida por su masculino; el cual de niña es su padre y de adulta, su esposo. La necesidad de afecto o atención la encubre con un comportamiento de demasiada implicación con su primogénito, en especial si la figura de marido u esposo no existe (viuda, divorciada). Ella es la típica madre que necesita ser indispensable para su hijo, le impide decidir el mínimo detalle, está al tanto de cada paso que el hijo da.  

v    La madre forma a este hijo desde edades tempranas para suplir sus demandas emocionales enmascaradas en “cuidado materno”. Esta mujer forma al primogénito varón de manera que le supla sus carencias, las cuales –incluso en ciertos casos-, llegan a ser de orden material; en cuya situación el hijo se verá forzado a trabajar a edades tempranas para contribuir económicamente en el mantenimiento del hogar. 

v    El padre negligente se acomoda a la situación. Suele ser un hombre díscolo, de poco carácter o con dificultades para intimar y expresar afecto. Su conducta se ve beneficiada y compensada con la actitud de la madre sobreprotectora; en cuyo comportamiento se escuda para esconder su falta de compromiso e implicación, asimismo, evadir cambiar y superar sus conflictos. Lógicamente si el padre no existe, el fenómeno tomará más vuelo.


Habida cuenta de todo lo expuesto, las actitudes de negligencia y sobreprotección del padre y la madre, respectivamente, son el caldo de cultivo para que el primogénito varón se convierta en un Hijo Proveedor. En su infancia, aparte de lo emocional, es educado para cuidar a sus hermanos, realizar las labores domésticas o laborar prontamente. La madre se apoya constantemente en este hijo, ante la apatía y complicidad del padre -si existe la figura-.  


“El hijo proveedor” como esposo o novio

Generalmente, el encuentro amoroso de una mujer con este tipo de hombre termina con sufrimiento, ya que ella, además de conquistar al hijo, necesita conquistar a la madre, y si no lo consigue, deberá confrontarla. La esposa o novia requiere en muchas oportunidades “luchar” con la madre para "arrebatarle" el hijo. Esta relación se convierte en un campo de batalla constante entre suegra y nuera; situación que a menudo “reconforta” al hombre en disputa, pues su ego necesita el reconocimiento femenino y esta es una forma ideal para obtenerla. 

El compromiso de este hijo, fundamentalmente, se encuentra con su madre y hermanos, aunque si no tiene estos últimos, puede llegar a ser padre excelente con sus propios hijos. Este hombre, a menudo, es incapaz de consolidar una familia propia, pues ya tiene una. Este tipo de hombre puede ser la pareja de muchas mujeres, es decir, un "mujeriego". 


Ahora, te voy a dar algunos consejos para que empieces a superar este conflicto con tu hombre:


Consejos para conseguir su compromiso


Sobre él

  • Inhíbete de batallar con la suegra, ya que esto ocasionará una mayor turbación y conflicto en la relación.  
  • Jamás ser su cómplice. Esto significa que no justifiques el incumplimiento de sus obligaciones ni contigo ni con tus hijos.
  • Establece, claramente, los compromisos y obligaciones que este hombre debe cumplir, y la clave es: nunca hagas lo que a él le corresponde. Se trata de actuar, en lugar de hablar, esto le permitirá a este hombre observar las consecuencias de sus actos.
  • Valora dialogar con tu hombre sobre esta conducta, pues ten en cuenta que es él la única persona que puede cambiar. Tú puedes hacer muchos esfuerzos, pero mientras él no tome consciencia, la situación seguirá igual.

 Sobre ti

  • Analiza y siente, después de leer este artículo, si puedes estar esperando que tu hombre cambie y eso nunca va a suceder. Pues de ser así, será un gran desgaste emocional y terminarás perdiendo mucho.
  • Revisa tu compromiso contigo misma ¿es mucho o poco? Fíjate, si exiges o pides compromiso, la primera que debe comprometerse eres tú. Te hago algunas preguntas para que sepas tu nivel de compromiso: ¿Te atiendes? ¿tienes tus propios sueños? ¿velas por tu salud? ¿te das tiempo?
  • Pregúntate para qué has atraído este tipo de hombre. Cuál es tu carencia, tu vacío emocional, tu información inconsciente que se complementa con la que tu hombre tiene, en otras palabras, con su conducta. 
  • Date cuenta que, cuando alguna mujer se encuentra como pareja de un Hijo Proveedor, están implícitas en ella unas características que se complementan con la actitud que él presenta. En otras palabras, existe en ti algo que se complementa con la conducta de él.
  • Busca ayuda profesional, esto dependerá del arraigo de esta conducta y la forma de interactuar tuya en la cohabitación con este hombre.
  • No cometas el mismo error de tu suegra ni de la familia de tu hombre con tus propios hijos. Por eso, te voy a dar unos consejos, si eres madre.

Si eres madre


Si una madre es capaz de tomar conciencia de que está formando a un Hijo Proveedor, pues bien, ¡felicidades!, ya que es bastante difícil darse cuenta de ello. Veamos los consejos:
  •  Aprende de los errores que has visto que han cometido (familia original) con él para que eduques a tus hijos en autonomía y salud emocional. 
  • Empieza a liberar a tu hijo de funciones tales como: cuidar de sus hermanos, conseguir dinero para sostener la familia (es responsabilidad del padre o en su defecto de la madre), ser el refugio de sus tristezas, el cómplice o confidente propio, pedirle ayuda constantemente para suplir obligaciones de los padres, entre otras. 
  • No duermas con tu hijo en la misma cama. Pues lo cual, genera gran confusión en la sexualidad del hijo y, por tanto, una inversión de roles.
  • Debes evitar actitudes como: hacerte la víctima frente a tu hijo para conseguir algo de él o ella; hablarle mal de su padre para que te ayude a defenderte de la falta de compromiso de este -aunque sé que es una tentación constante, debido a lo que sientes por la falta de compromiso de tu pareja, pero en verdad, es mejor que te desahogues con otra persona-
  • Educar a tu hijo con normas o límites.  Siempre ajustadas a su edad y obligaciones como hijo, sin sobrecargarlo, ya sea física o emocionalmente. 
  • Ten en cuenta este precepto para educarlo: “que cada día, me necesite menos”.
  • Anímale a pensar por sí mismo, a descubrir qué es lo quiere hacer, ayúdalo a construir sus propios sueños.
  • No proyectes tus carencias emocionales en él. Debes estar muy atenta a cuando tu hijo se resiste a hacer lo que tú quieres, por ejemplo, a estudiar la carrera que tú desearías, a practicar el deporte que te gustaría, a escuchar tus problemas; darte un beso o abrazo, etc. Para que estés segura de si estás proyectando, pregúntate: ¿Esto que le pido a mi hijo es lo mejor para él o para mí?

Como ves, conseguir el compromiso de tu hombre, aunque parece una tarea compleja, mientras exista disposición y toma de consciencia es posible

Al comienzo, te dije que era bastante difícil, pues era mejor para que pensaras si valía la pena. Pero como has llegado hasta este punto, me imagino que sí, y este hombre merece que des los pasos ¡empieza, ánimo!

¡Te invito a dar tus aportes y comentarios!




Luz Quiceno

Escritora, Especialista en BNE© y GE

Directora | Luz en tu camino interior

+447582173795
contactar@luz-entucaminointerior.com
www.luz-entucaminointerior.com
facebook
twitter
instagram





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Recent Posts

Artículos destacados